Hay opiniones de todo tipo y suele ser un tema bastante polémico, pero yo lo digo alto y claro: no tolero la mala ortografía.

No puedo pasar por alto las tildes mal colocadas (u omitidas por defecto), las comas puestas al tuntún y una gramática pobre. Y, desgraciadamente, esto cada vez prolifera más. Y lo peor es que empieza a aumentar en los profesionales de la comunicación y (sí, me leéis bien) los escritores.

Hay muchos que argumentan que lo que importa es su historia, sus personajes, la manera en la que narran… Pero la ortografía forma parte de la escritura, lo queramos o no. Un escritor es un amante de las letras y tiene que dominarlas. Le tienen que importar lo suficiente como para escribir correctamente.

Un escritor tiene que buscar cómo se escribe una palabra cuando tiene dudas. En la mayoría de los casos, sólo sirve para confirmar que estaba en lo cierto, pero hay que hacerlo. Tiene que preocuparse por respeto al lector.

¿Vosotros podéis leer una historia plagada de faltas de ortografía o con mala puntuación? Yo no puedo. Corrijo mentalmente cada palabra que leo y, si estos fallos abundan, me paso más tiempo corrigiendo que leyendo. Y al final no puedo seguir la historia. Y sé que no soy la única, muchos lectores (sobre todo los más voraces) son también muy exigentes con este tema.

¡Lo hago incluso en inglés! Hoy estaba leyendo un libro autopublicado (leo bastantes indies del mundo anglosajón porque me suelen regalar una copia ARC –Advanced Reading Copy– para reseñar en Goodreads gratis) en el que pude leer «Your» en vez de «You’re«. En otra copia que leí hace unos días otro autor confundía «than» y «then«. Afortunadamente, los escritores anglosajones autopublicados son muy profesionales y sólo encontré esos errores una vez, por lo que supuse que era una errata. La competencia allí es muy grande y quien no es perfecto en cuanto a forma y estilo no sobrevive.

Si corrijo la ortografía y gramática cuando leo en inglés (que no es mi lengua materna), imaginaos en castellano. Me duelen los ojos, me da dolor de cabeza. ¿Soy un poco rarita por ello?

Creo que no, el escritor tendría que ser excelente en el manejo de las letras. Tiene tiempo de aprender y de formarse, pero se le debe exigir que presente un texto sin errores.

¿Qué pensáis vosotros? ¿También corregís mentalmente como yo? ¿Podéis terminar un libro si tiene faltas de ortografía? ¿Creéis que son perdonables?