El mercado estadounidense hace tiempo que nos lleva la delantera en cuanto a libros digitales se refiere. No sólo empezaron antes a vender este formato, las cifras que manejan son impensables para el mercado español.

Sin embargo, es interesante analizar qué es lo que ocurre al otro lado del charco porque es muy probable que pronto se repitan los mismo patrones en nuestra tierra. Nosotros estamos en la fase inicial que ellos experimentaban hace algunos años y todo parece indicar (¡esperemos!) que pronto seguiremos sus pasos.

Smashwords, una plataforma de autopublicación muy popular en el mercado anglosajón, publicaba un interesante estudio en el que se recogieron unos datos que me llamaron mucho la atención:

Como podemos observar, el precio que dota de mayores royalties a los autores se sitúa entre 3 y 3.99 dólares (entre 2,20 y 3 euros).

De hecho, este estudio revela que los libros que se vendían a 3.99 dólares tenían mejores resultados de ventas que los de 2.99 dólares. De hecho, eran la franja de precios que más vendía (exceptuando los gratuitos).

¿Qué explica esto? Los lectores de libros electrónicos están cambiando sus hábitos de consumo en el mercado estadounidense y ya no son tan sensibles al precio como lo eran antes.

Este gráfico que os muestro es el gráfico de adopción de la tecnología de Everett Rogers. En él se muestran los distintos tipos de usuarios que compran la tecnología. Los innovadores (la minoría, los primeros que compran lo último en tecnología cuando acaba de salir para ser los primeros), los primeros que adoptan esta tecnología, la mayoría  (temprana y tardía) y los rezagados.

¿Quién empezó a comprar un Kindle, un e-reader o una tablet? Los innovadores o los primeros que adoptan esta tecnología. Gente con un perfil muy específico. En el caso del Kindle, era gente que amaba los libros, leía mucho y, por lo tanto, compraba mucho. Eran muy sensibles al precio. Sin embargo, a medida que esta tecnología se ha hecho más mayoritaría, el perfil cambia. El abuelo al que le han regalado un nuevo lector electrónico. La chica que tiene una tablet y, de vez en cuando, se descarga algún libro con la aplicación de Kindle. Gente que no compra tanto, no son tan sensibles al precio, pero sí buscan calidad. Y el precio, lo queramos o no, psicológicamente induce a pensar que es sinónimo de calidad (aunque no tenga por qué ser así).

En Estados Unidos parece que están experimentando esta nueva fase. El precio ya no es tan importante. En España aún estamos en las primeras fases y el precio sí puede ser determinante. ¡Pero paciencia! Poco a poco creo que viviremos la misma situación.

¿Qué os parece? ¿Creéis que en España pasará lo mismo? ¿El mercado está preparado? En mi caso, el precio de mi novela siempre ha sido 2,68 euros y ha funcionado muy bien.